Reforma de vivienda unifamiliar del siglo XIX en Triana
Arquitectos Lourdes Bueno Garnica y Miguel Villegas Ballesta
Colaboradores Conso González Arriero, estudiante ETSA Sevilla y Antonio Domínguez-Valdés, estudiante de diseño
Una vivienda de finales del siglo XIX, con una elevada protección patrimonial y como clientes una familia que confía plenamente en nosotros.
“¿Qué necesitáis?¿Qué esperáis de vuestra casa?”
“No sabemos, vosotros sois los profesionales.”
La primera sensación fue de euforia, la segunda de responsabilidad y de búsqueda de nuestro conocimiento íntimo de esta familia para poder acercarnos a su vida, a sus situaciones presentes y futuras.
El inmueble, sujeto paciente del proyecto, es una casa patio sevillana casi de manual. Los tres metros entre muros de carga, determinados por las condiciones constructivas de su época, que se repiten casi como módulo en toda la vivienda, nos permiten sorprendentemente trabajar con infinidad de configuraciones espaciales, y nos damos cuenta de que la variedad de resultados de estas combinaciones tiene siempre un factor común, los espacios “extra”.
El margen de trabajo que nos dan estos espacios extra nos permite ser capaces de generar espacios versátiles que al unirse a las habitaciones las convierten en “habitaciones y media” o “despachos personales” para cada miembro de la familia.
En todos nuestros proyectos intentamos incorporar el futuro, anticipar las posibles variaciones de las condiciones de nuestros clientes para que nuestros proyectos sean capaces de adaptarse a las mismas. En este caso hemos tenido ocasión de comprobar su efectividad.
Una excesivo retraso en el comienzo de las obras, por causas ajenas a nuestro trabajo, hizo que las condiciones familiares variasen notablemente. La adaptación del proyecto a las nuevas condiciones no nos llevó más de unas semanas.